He estado mirando por encima el último boletín económico del Banco de España.
La primera novedad es que se empieza a reconocer oficialmente que, la UE tal y como está constituída, presenta disfunciones:
"Al mismo tiempo, sin embargo, la propia acumulación de esos desequilibrios y las dificultades para articular una estrategia ampliamente consensuada para corregirlos de una manera ordenada dentro de la UEM pusieron de manifiesto la existencia de debilidades importantes en el marco europeo de gobernanza económica"
... y específicamente, y este aspecto es más importante (cuanto tiempo hace ya que llevo dando la lata con esto), en materia financiera, en concreto en relación a las finanzas públicas:
"incluyendo entre ellas la ausencia de un mecanismo potente y
flexible de gestión de crisis y de provisión de soporte financiero a los Estados en dificultades. Estos mecanismos son esenciales para atajar las tensiones en una fase suficientemente temprana del proceso, que es cuando su tratamiento es menos difícil"
... o lo que es lo mismo, no se ha hecho en un momento y ahora es más complicado.
También queda claro que las empresas no invertirán gracias a la confianza en el PP no gracias a un marco laboral flexible. Sin consumo no habrá inversión:
"La inversión empresarial se verá indudablemente afectada por la atonía del gasto interno"
Y el gasto interno seguirá disminuyendo por dos motivos. El primero explicito:
"La demanda nacional continuará su proceso de
ajuste. El consumo privado se verá afectado por el descenso del empleo y por el menor
soporte que van a proporcionar las AAPP a las rentas de los hogares, si bien el impacto de
estos dos factores se verá en parte compensado por un incremento más moderado de los
precios y, probablemente, por una continuación del proceso de disminución de la tasa
de ahorro, aunque el margen que esta deja para suavizar el patrón del consumo privado es
cada vez más reducido."
... y que las ventas al exterior no sólo dependen de la productividad, sino también de la voluntad de las propias empresas españolas y su esfuerzo en este sentido:
"Pero también es verdad que las
ventas al exterior se han comportado de una forma muy favorable en los dos últimos años
y que las empresas españolas han diversificado crecientemente sus exportaciones hacia
terceros mercados, cuya demanda es más dinámica."
Esto también lo he comentado en alguna ocasión:
"Desafortunadamente, este impulso de la demanda externa no será suficiente para compensar el efecto del resto de fuerzas contractivas sobre el empleo, por lo que cabe prever
que se produzcan caídas adicionales de ocupación"
Algo razonable porque el consumo interno es el 80% de nuestro PIB.
Sobre el empleo, y por si alguien todavía pensaba que la
reforma laboral tenía por objeto flexibilizar unicamente y no bajar los salarios este párrafo creo que lo deja claro:
"Si la reforma laboral empezara pronto
a desplegar sus efectos, los salarios podrían crecer algo menos que en 2011, lo que, junto
con las mejoras en productividad, conduciría a nuevos descensos de los costes laborales
por unidad de producto y así avanzar en las ganancias de competitividad. Los precios
continuarán la senda de moderación que iniciaron en la segunda mitad del año pasado,
aunque no ha desaparecido el riesgo del alza en los precios de la energía."
Tan sólo una última anotación (no me he leído todo el boletín). Al parecer los flujos de capitales (entrada) han descendido en los países desarrollados pero han aumentado en los emergentes (excepto, vaya, en los del este de Europa ¿tendrá algo que ver con las políticas que aquí se aplican?)
"La recuperación de las economías emergentes en su conjunto esconde importantes diferencias entre regiones, dependiendo del impacto de la crisis. Como puede observarse en el panel derecho del gráfico 2, las economías de Europa del Este, que sufrieron la crisis con mayor virulencia y siguen más expuestas por su cercanía al área del euro, experimentaron una reducción mayor de los flujos de entrada, de la que apenas se han recuperado. Por el contrario, los países latinoamericanos han superado con creces el nivel de flujos de entrada previo a la crisis y han marcado un nuevo máximo a principios de 2012. La muestra de países asiáticos —de la que está excluida China— se sitúa en una posición intermedia: los flujos llegaron a ser negativos a inicios de 2009, se recuperaron con mucha intensidad, pero no han vuelto a alcanzar los niveles previos."