Cientos de muertos en un incendio en una cárcel de Honduras
Las autoridades ya contabilizan 357 fallecidos
Los testigos relatan escenas dramáticas de los reos saltando al vacío
Al menos 357 personas han muerto en una cárcel de Comayagua, en el centro de Honduras, a causa de un inmenso incendio ocurrido en la madrugada de este miércoles. Las autoridades indican que la cifra podría aumentar en las próximas horas puesto que se cree que varios cuerpos están todavía en el interior de las celdas. Las cadenas de radio hondureñas informan del drama que se vive en este lugar apartado de la empobrecida nación centroamericana, marcada también por la violencia y la lucha de los narcotraficantes y los pandilleros de las Maras. Comayagua está a 75 kilómetros al norte de Tegucigalpa.
Familiares de los presos esperan noticias. / ORLANDO SIERRA (AFP)
La experta forense Lucy Funes ha informado de que se teme que la cifra de muertos supere los cientos. El penal encerraba a cerca de 800 presos. Los familiares de los reclusos han llegado, con desesperación, hasta las zonas cercanas del presidio, en busca de información de sus familiares, pero nadie da muchas explicaciones. Ni siquiera se conocen las causas exactas del incendio. La cantidad de supervivientes tampoco se conoce. En estas cárceles, por lo general, los presos viven en un detestable hacinamiento e insalubridad.
“Tengan un poco de paciencia, yo sé que no es fácil cuando se tiene dolor, pero necesitamos identificar los cuerpos antes de entregarlos”, ha dicho a los familiares el ministro de Seguridad, Pompeyo Bonilla, en un intento por calmarlos.
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Más de 300 muertos en el incendio de un penal en Honduras.
Los familiares de los reos se han agolpado a la entrada de la cárcel para pedir a gritos entrar a la zona del incendio y recoger los cuerpos de sus parientes, de acuerdo a la que reporta el diario electrónico Proceso Digital, de Honduras. El director de los Centros Penales en Honduras, Danilo Orellana, dijo que son tantos los cuerpos que se ha pedido refrigeradores a Tegucigalpa y están siendo ubicados en un campo de fútbol “porque son tantos” que se requiere de un espacio grande.
Los cadáveres están siendo llevados a un campo de fútbol “porque son tantos” que se requiere de un espacio grande
La gente ha amanecido en Comayagua con estupor e incertidumbre. Las ambulancias, vehículos de la Policía y bomberos no cesan de entrar y salir del lugar siniestrado. Una enfermera del estatal Hospital Santa Teresa ha comunicado a los periodistas que una treintena de reos con quemaduras de tercer y cuarto grado han sido atendidos en ese centro, mientras que otros han sido remitidos al Hospital Escuela en Tegucigalpa.
"Hay muchos cuerpos apilados en el interior de los módulos que seguramente intentaban pero no pudieron escapar del fuego, son cosas que se pueden apreciar", agregó un portavoz de los Bomberos, quien explicó que cada una de las dos naves de la cárcel tiene cinco celdas.
Dramáticos testimonios
Algunos de los reos que lograron escapar del fuego rompieron el techo y luego saltaron al vacío, según algunos dramáticos relatos de familiares de presidiarios. Otros de los presos se habrían fugado, según la información preliminar.
El 17 de mayo de 2004, unos 107 reos murieron quemados en un incendio en el presidio de San Pedro Sula, norte, la segunda ciudad del país. El suceso fue atribuido a fallos estructurales de la prisión, algo extensible a todo el sistema penitenciario de Honduras.
El 5 de abril de 2003, unos 66 reclusos y tres mujeres, incluida una menor de edad, que visitaban familiares en la Granja Penal de El Porvenir, cercana a la caribeña ciudad de La Ceiba, murieron en una matanza que se produjo entre reos miembros de las pandillas y otros presos comunes.