Un guardia civil es condenado a dos años de prisión por abusar de su cuñada de 14 años
Los jueces consideraron probado que sometió a tocamientos a la niña en su piso de Novo Mesoiro y cuando veraneaban en familia en una casa de Lugo
El procesado la llamó "zorrita" en el juicio
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El condenado, durante el juicio celebrado este mes en la Audiencia Provincial. / fran martínez
TANIA SUÁREZ | A CORUÑA Los jueces de la sección segunda de la Audiencia Provincial consideran probado que desde el verano de 2008 hasta octubre de 2009 un guardia civil de 58 años abusó sexualmente de la hermana de su mujer, que tenía 14 años. El tribunal condenó al procesado, que se sentó este mes en el banquillo de los acusados, a dos años de cárcel y a la prohibición de acercarse a menos de 200 metros de la víctima y de comunicarse con ella durante seis años, así como el abono de una indemnización de 20.000 euros.
La sentencia subraya que el relato de la víctima es "creíble" y destaca que el imputado manoseó a la adolescente por debajo de la ropa y que, en ocasiones, la obligó a tocarle los genitales. El guardia civil, que en la actualidad está retirado, abusó de la joven durante las vacaciones que pasaron el verano de 2008 en casa de unos familiares, situada en el municipio lucense de Valadouro, y en el domicilio de Novo Mesoiro en que convivía el procesado con su mujer y su hija.
"Este tribunal cree la versión de la denunciante, que en el plenario declara de modo serio, sin retórica, sin exageraciones, cómo su cuñado la tocaba y le decía que la quería mucho y que no se lo dijese a su madre. Ella se quedaba paralizada, no sabía qué hacer", señalan los magistrados en el fallo, en el que recalcan que el testimonio de la afectada, que estuvo defendida por el letrado Esteban Rico, está "exento de elementos que puedan indicar que actúa movida por un móvil espurio, resentimiento o venganza".
El abogado de la defensa aseguró que la niña estaba enamorada del condenado. "En modo alguno se puede llegar a semejante conclusión", recalcan los jueces, quienes sostienen que el relato del acusado carece de credibilidad, al tiempo que destacan que "descalificó" a la menor durante el juicio cuando dijo que es "conflictiva, mentirosa, vaga, zorra, zorrita".
El procesado, según la sentencia, mantuvo que la denunciante solo había estado en la vivienda donde veraneaban un fin de semana. La víctima, sin embargo, aportó detalles de la convivencia e incluso el horario de trabajo del sospechoso. "Difícilmente a la edad de la niña podría aportar unos datos tan concretos si solo estuviese allí un fin de semana", afirman los jueces.
El tribunal también hace referencia en el documento a la versión de los testigos que avalaron a la adolescente. La madre de la joven y de la esposa del condenado contó que su hija pequeña le dijo que su cuñado le había tocado los pechos. Ella, sin embargo, no le prestó importancia y le dijo que, si volvía a ocurrir, la avisase. Por ello, la niña recurrió a un profesor. "La madre cuenta que a raíz de eso le cambió el carácter y que cuando contó lo que le pasó en el colegio, lo entendió todo", señalan los magistrados, que también hacen referencia a la versión de un profesor de apoyo, de la orientadora de su instituto y de los forenses. Todos ellos corroboran el testimonio de la afectada.
Los informes de los expertos que declararon durante la vista acreditan que la menor sufrió abusos. Así, un psicólogo del Sergas manifestó que padece "un cuadro clínico marcado, entre otros síntomas, por la ansiedad, retraimiento social, miedo a salir a la calle sola, evitación de relaciones sociales, no aceptación de la imagen corporal y problemas de relación en el colegio".
El fiscal acusó al procesado de cometer un delito continuado de abuso sexual con prevalimiento y acceso carnal, por el que exigía que fuese condenado a diez años de prisión y a la prohibición de acercarse a la víctima durante ocho años. El fiscal también demandaba que le impusiesen el abono de una indemnización de 15.000 euros por el daño moral que le causó a la menor.
