* En total han arrestado a 38 personas en la operación Rosales.
* Los repartidores de maletas y otros empleados colaban droga por el aeropuerto.
* El alto cargo policial, de Torrejón de Ardoz, tenía dos bares donde vendía los estupefacientes y blanqueaba el dinero de la trama.
* También se les acusa de inmigración clandestina.
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La Policía Nacional ha detenido a un subinspector de este Cuerpo en Torrejón de Ardoz y a 37 personas más, la mayoría trabajadores del aeropuerto de Barajas, acusados de tráfico de drogas, blanqueo de capitales e inmigración clandestina.
El policía regentaba dos bares de copas donde se traficaba con droga
Según ha informado hoy la Dirección General de la Policía y la Guardia Civil, la denominada Operación Rosales comenzó con la investigación de un subinspector de la Comisaría de Torrejón de Ardoz, quien supuestamente regentaba junto a su mujer dos bares de copas en los que se traficaba con droga y se blanqueaba el dinero que conseguía el grupo, dedicado al tráfico de estupefacientes.
Finalmente han sido detenidos en Madrid este subinspector y su mujer, nueve trabajadores del aeropuerto de Barajas (todos de origen colombiano) y varios de una compa?ía de bajo coste que opera en el mismo, así como un total de 17 personas en Valencia.
El liderazgo del grupo recae sobre Diego León C.S., que tiene dos reclamaciones judiciales en vigor; la primera, Búsqueda, Detención e Ingreso en prisión por la Audiencia Nacional por proposición para el asesinato; y la segunda, de nuevo búsqueda y detención por un juzgado de Torrejón, en relación con una agresión en la que presuntamente esgrimió un arma de fuego.
También en Valencia
Parte importante de los miembros de la organización estaban afincados en Madrid, dedicados fundamentalmente a la introducción de cocaína y su distribución. Otros lo estaban en Valencia, donde se detuvo al máximo responsable: Juan José C.T., y 16 individuos más, alguno de ellos funcionarios de la Administración. Las detenciones corrieron a cargo de Asuntos Internos y las UCRIF Central y de Valencia, y las acusaciones fueron falsificación de documentos e inmigración clandestina.
Comenzaron a investigar al intervenir un paquete con droga procedente de Caracas
En cuanto a la trama madrile?a, la operación policial ha sido ejecutada fundamentalmente en dos fases. En una primera, el pasado día 11, se intervino un paquete postal y una maleta, procedente de Caracas que, supuestamente, habría de embarcar hacia Ibiza; pero, que trabajadores del aeropuerto debían "distraer" para conseguir así su preciado contenido: 17.235 gramos de cocaína.
En este caso, la intervención policial culminó con el arresto de nueve personas, todos de carga y descarga en el aeropuerto, repartidores de maletas o trabajadores de empresas de paquetería.
La segunda fase, hasta completar los 38 detenidos, tuvo lugar a raíz de las investigaciones realizadas a una empresa de vuelos de bajo costo, donde varios trabajadores vieron la fórmula ideal para la introducción de cocaína en nuestro país. Se colaboró con policías de otros países y gracias al flujo de informaciones lograron intervenir 33 kilos de cocaína en Perú y uno en Bruselas.
Conductores de autobús y maleteros
El destino de esta droga era el grupo afincado en Torrejón y con los 13 arrestos finaliza el operativo y la desarticulación del grupo de narcotráfico. Entre ellos figura un agente de policía y su mujer. Y de nuevo, trabajadores del aeropuerto: supervisores de empresas de "handling", conductores de los autobuses que, desde los aviones, acercan a los clientes a la terminal, coordinadores de turno y maleteros.
De acuerdo con las investigaciones policiales, el subinspector daba cobertura a la organización y participaba de distintas formas: consultaba las bases de datos a requerimiento de los responsables y era, junto con su mujer, testaferro; para ello, regentaban dos bares de copas: "Los Rosales" y "Sabor a Caney", donde se traficaba al menudeo y se blanqueaban los beneficios de la banda.